Introducción a la iontoforesis
Técnica electroterápica basada en la aplicación de radicales medicamentosos (iones y moléculas ionizadas) al organismo por vía transcutánea e introducidos por la corriente galvánica y sus derivadas.
APLICAR CON SEVEROS CUIDADOS DADO EL ALTO RIESGO DE QUEMADURAS EN LOS PACIENTES.
La iontoforesis requiere de nuevos planteamientos e investigaciones que conduzcan al adecuado perfeccionamiento de su práctica y de su dosificación. En la actualidad, se realiza demasiado empíricamente y sin los debidos conocimientos de:
- parámetros eléctricos,
- del comportamiento orgánico,
- de las características electroquímicas de los medicamentos,
- de la cantidad de medicamento introducido,
- etcétera.
La corriente galvánica (corriente continua para los electrónicos) usada en fisioterapia, la medimos en mA aplicados al paciente. Siempre que hablemos de A o de mA se refiere a una medida en la unidad de tiempo (1 s).
La expresión "corriente directa" es traducción del inglés, que no
procede, porque de siempre hemos tenido su denominación en español
como corriente continua.
Corriente galvánica continua
Esta corriente galvánica que se inyecta al organismo es aplicada a un "conductor de segundo orden", es decir a un conductor formado por compuestos iónicos y otros elementos químicos. Habitualmente y únicamente regulamos los miliamperios (mA) aplicados al paciente y es un sistema insuficiente. Al menos debemos ajustar la intensidad por unidad de superficie de la piel bajo el electrodo pequeño (que son coincidentes). Se dan como buenos valores de 0.1 , de 0.15 y de 0.2 mA por cada cm2 (mA/cm2) de la piel o del electrodo pequeño. Pero todavía no se tiene en cuenta el tiempo de sesión ni el comportamiento de conductividad del conjunto electrodos - paciente.
Para saber la intensidad que debemos ajustar en el estimulador teniendo en cuenta la superficie del electrodo pequeño y de la intensidad deseada, introducir el valor de los centímetros cuadrados y elegir la dosis deseada.
Medida de la longitud del electrodo activo
Se mide el electrodo pequeńo. Siempre medir la gamuza o gasas, No medir la goma del electrodo.
Medida de la anchura del electrodo activo
Fórmula para corriente galvánica pura al 100%
Corriente galvánica
En cuanto al comportamiento del circuito eléctrico entre la máquina y el paciente, este conjunto ofrece una resistencia particular en cada caso, dependiendo de la zona tratada, condiciones de los electrodos y estado de los tejidos. Por ello, aunque el valor de la intensidad medida en mA sea un valor "X" para todos los casos, los otros parámetros eléctricos son diferentes en cada paciente. ¿Cómo influyen estas circunstancias en la dosificación?. Veamos:
Supongamos que en varias aplicaciones medimos la intensidad y el voltaje simultáneamente. aunque la intensidad ajustada sea la misma, el voltaje prácticamente siempre es diferente.
No es lo mismo aplicar 6 mA con 20 voltios que 6 mA con 14 voltios.
6 mA con 20 V, significa que la resistencia del circuito es de 3333.3 Ohm y 6 mA con 14 V se encuentra con una resistencia de 2333.3 Ohm.
En la siguiente fotografía se presenta un prototipo de galvanizador en el que se contemplan la medida de intensidad y la de voltaje simultáneamente.
Prototipo de galvanizador que mide la intensidad y el voltaje aplicados simultáneamente
Por otra parte, la resistencia del paciente va cambiando durante la sesión provocando modificaciones en los parámetros eléctricos. Si trabajamos en C.C., el voltaje se está modificando (observar las fotografías de evolución de la impedancia corporal con galvánica).
Para evitar las quemaduras con la galvánica se recomienda no superar 0,1 mA por cada cm2 (otros autores indican valores diferentes). Pero si pensamos en la técnica de iontoforesis, es posible que sea requerido un valor de miliamperios diferente al recomendado, pero para evitar el riesgo de quemadura no podemos superarlo.
Otra consideración a contemplar es la de no entrar en contraposición de efectos, es decir: la corriente galvánica posee "per sé" efectos terapéuticos propios bajo cada electrodo por su polaridad y el medicamento, otros específicos y derivados de su composición. ¿Cuáles prevalecerán? ¿Se sumarán? ¿Se anularán?.
Si aplicamos durante un tiempo de sesión (digamos 15 minutos) un medicamento en iontoforesis (en caso de haber penetrado), ¿cuántos miligramos de radical medicamentoso hemos introducido?.
Si el medicamento posee o está compuesto por diversos principios químicos, ¿cuál o cuáles están introduciéndose en el organismo?.
¿Se comportan igual los iones que son solubles en agua, que los solubles en grasas o que los solubles en alcohol?.
Es frecuente empapar previamente las gasas destinadas a la iontoforesis con suero fisiológico y cabe preguntarse: ¿sobre qué actuamos electro químicamente, sobre el cloruro sódico o sobre el medicamento?.
Para disociar unos radicales de otros en las electro uniones moleculares se requiere determinado potencial eléctrico (voltaje), sin embargo no conocemos el voltaje alcanzado (a no ser que el equipo se diseñe para tal función). Así mismo, necesitamos conocer el comportamiento electroquímico de la molécula o complejo molecular empleado, el peso molecular del radical que nos interesa, si la parte introducida es útil en cuanto a sus efectos terapéuticos, como puede interaccionar en el interior orgánico.
¿Cuánto tiempo debe durar una sesión para conseguir introducir X mg del radical medicamentoso pretendido?.
Son demasiadas preguntas que no tienen todavía respuesta, aunque experimentalmente se ha demostrado que la técnica funciona con determinados compuestos (normalmente de moléculas simples), pero nos hallamos ante una investigación no concluida ni adaptada a los nuevos compuestos medicamentosos mucho más complejos que los habituales de principios de siglo.